Esto salió de que por estos meses se empieza a dar la nota sobre la matrícula en el colegio y todos empiezan a decir que se van a cambiar de colegio. Y no quiero. El año pasado se cambio una de mis amigas más más cercanas y este año otra está averiguando para cambiarse (podría decirse que son dos de mis mejores amigas pero no me gusta ese término.) No quiero que el año que viene no esté, no me imagino el aula sin ella. Por suerte mi otra mejor amiga no tiene planeado irse porque no soportaría que se vayan ambas. Encima no me quiero cambiar de colegio, porque no me gustaría cambiar toda mi rutina que ya conozco de memoria, los profesores, el lugar, todo. El cambio podría ser para mejor, pero también para peor y eso me asusta.Es un pensamiento bastante infantil y estúpido, ya lo sé, pero es lo que me pasa.
Es re triste, los cambios siempre asustan y más si estás acostumbrada a una rutina siempre igual. Pero los cambios se dan por algo y sin ellos creo que no avanzaríamos...me encantó tu entrada(:
ResponderEliminarGracias ♥
ResponderEliminarEs cierto, sin ellos no avanzaríamos, pero en algunos lugares casi no quisiera avanzar.